LA GUERRA DEL FIN DEL MUNDO

martes, 17 de noviembre de 2009

el fonema "b"

Cuídate de mi, por lo menos de momento, todos los pensamientos controlables e incontrolables, todas las sensaciones, los sentimientos desordenados, no son buena compañía. La violinista que contratamos para celebrar nuestro pacto ahora se empeña en encordar su violín con los tejidos de mis conexiones neuronales, la verdad para ella el sonido es sublime pero a mi me revienta la cabeza a partir de la segunda nota, la consciencia esta pasando a ser un estado de aturdimiento constante.
Por más, solo puedo reconocer que los periodos de silencio son enormemente placenteros, me encuentro con el yo primigenio, sonrío, canto, bromeo, bailo, doy saltos, entono de forma estúpida, me río de todo, juego con el equilibrio, con las esquinas de mi casa, con los huecos idiotas que no guardan nada, entro y salgo. Me siento totalmente liberado de todas las ataduras que yo mismo anudé, me desinhibo, me gusto, me digo cosas bonitas, creo en un futuro mejor para mi y para todo el que me rodee, me olvido del sonido agudo, del eco de madera, de la maestra en armonía y toda la música que suena es por y para mi gozo.
Algo más puedo decir sobre los miserables estados de la conciencia imperecedera, que a veces los siento dentro del círculo de la razón y otros dentro de la elipse de la sinrazón. Porque el círculo no es perfecto y la elipse soluciona problemas centenarios, la mezcla de las dos figuras me relaja y me deja existir de forma pacífica, os invito a la reflexión, batir vuestras ideas en círculos y elipses, relajaos conmigo…………………………

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